3.8.25

🧵 Diario de una Tejedora en Apuros - Día 21

Día 21: Cuando tu hilo favorito desaparece del planeta Tierra

Todo empezó bien.
Tenía tres ovillos de un hilo increíble: mezcla de merino con seda, color lavanda otoñal, textura de abrazo.
Perfecto. Inigualable. Irremplazable.
Hasta que necesité más.

Y ahí…
el vacío existencial.


😱 Misión: localizar ese hilo

Busqué en:

  • La tienda online → “producto agotado permanentemente”.

  • Marketplace de segunda mano → vendido hace 8 minutos.

  • Foro de tejedoras → todas llorando por lo mismo.


🔍 Soluciones desesperadas

  • Pedí ayuda en grupos de Facebook. Me ofrecieron otros hilos “parecidos”… como comparar un croissant con pan de molde.

  • Consideré rehacer todo con otro hilo. Pero el chaleco me miró desde la silla, como diciendo “Ni lo pienses.”

  • Llamé a la tienda. Literalmente. Me dijeron: “Ya no se fabrica.” Me costó no gritar.


🧠 Qué haré distinto ahora

  1. Siempre comprar ovillos extra. Siempre.

  2. Guardar etiquetas con código de tinte y marca.

  3. Hacer muestras antes de lanzarme.

  4. No enamorarme tan rápido (de un hilo).


🎭 Reflexión del Día

Perder tu hilo favorito es una tragedia menor…
Pero en el mundo tejeril, se siente como si te cancelaran tu serie favorita a mitad de temporada.

Y sí, encontré un hilo sustituto.
No es lo mismo.
Pero como en toda historia de amor tejida… se aprende a querer lo nuevo.

2.8.25

🧵 Diario de una Tejedora en Apuros - Día 20

Día 20: El orgullo de terminar un proyecto (y esconder los errores como una profesional)

Hoy terminé un chaleco.
Uno de esos proyectos que te acompañan durante semanas y se convierten en parte de tu vida (y de tu cesta de frustraciones).

Lo bloqueé, lo cosí, lo planché con cariño, y cuando lo miré completo pensé:
“¡Parezco alguien que sabe lo que hace!”


👀 Pero si miras de cerca…

  • Un borde tiene dos puntos menos.

  • Un bolsillo está ligeramente torcido.

  • Y hay un lugar donde cambié el hilo y se nota… si te acercas con lupa y mala intención.


🧠 ¿Qué aprendí?

  1. Terminar es más importante que la perfección.

  2. Los errores son parte del tejido. Como el café en mi mesa: siempre están ahí.

  3. Nadie se fija tanto como tú. (A menos que te rodees de tejedoras, y aún así, te entienden.)


🧶 Trucos ninja para disimular errores:

  • Bloqueo milagroso: El vapor suaviza muchas verdades.

  • Bordado salvador: Una flor aquí, un detalle allá, y ¡adiós fallo!

  • Etiqueta artesanal bien puesta: Que se note que es hecho a mano… no perfecto de fábrica.


🎉 Reflexión del Día

Terminar un proyecto es como cerrar un capítulo.
Puede que no sea perfecto…
pero es tuyo.
Y eso, querida tejedora, vale más que mil puntos perfectos.

1.8.25

🧵 Diario de una Tejedora en Apuros - Día 19

Día 19: El día que la máquina circular me hizo llorar (otra vez)

Hoy iba a hacer unos guantes de dedos.
Nada complicado, solo un par.
Monté la máquina, coloqué el hilo, giré la manivela y…

CLACK.
Un sonido que sólo puede significar una cosa:
La máquina se ha ofendido.


🔧 Diagnóstico: mal humor mecánico

Al revisar vi:

  • Un punto atrapado.

  • Otro saltado.

  • Y un hilo colgando como si quisiera huir de la escena.

La máquina tenía hambre y se estaba comiendo mi proyecto. Literalmente.


🧠 Qué hice (sin gritar)

  1. Paré todo. (No sirve seguir girando si todo va mal.)

  2. Retiré el hilo con pinzas y mucha paciencia.

  3. Volví a montar el punto desde cero.

  4. Le hablé bonito a la máquina. (No sé si ayuda, pero me calmó.)


💡 Cómo evitar este drama:

  • Revisa la tensión del hilo. Muy flojo = caos. Muy tenso = caos peor.

  • Haz pruebas antes de empezar con el hilo en el proyecto real. Siempre.

  • No te confíes solo porque ayer funcionó. La máquina circular tiene memoria emocional.



😩 Reflexión del Día

Tejer con máquina circular es como tener una mascota robótica:
A veces colabora, a veces destruye tu día.

Pero al final… sí terminé el guante.
Solo uno.
El otro puede esperar a que me perdone.